sábado, noviembre 12, 2005

Entre las necesidades

Entre las necesidades que tenemos como personas catalogamos a algunas como esenciales, porque no podemos prescindir de ellas. Incluso hay gente que estudia, filosofa y crea estrategias para clasificar qué es lo más importante a la hora de ser humano. Para ser parte de este juego debo advertir que investigamos con un par de compañeras el tema, ya que nuestro seminario de tesis estaba relacionado con aquello. Por dar un nombre: Maslow con su pirámide de necesidades ¿quién no lo ha escuchado?.

Todo esto porqué iba???? ahhh!!! por los mismos rollos de siempre! ¿o acaso creyeron que daría un vuelco a mi identidad volviéndome más intelectual sólo por dar mejor impresión? no es la idea, hay que seguir una sola línea, si son más de una ya uno se vuelve vicioso y sucumbe ante la maldición.

Hoy revisé mi mail sólo porque esperaba un correo, no era importante de quién fuera (aunque tengo algunas preferencias), sólo quería saber si alguien que tenga mi dirección por ahí me recuerda lo suficiente para enviarme un "cómo estas" y contarme algo sobre su vida. En vez de enviarme minos en pelota, un mensaje sobre religión, una advertencia sobre la baja de msn (ese es un clásico), un nuevo virus y unas cadenas implican reenviar el mail a 9.874.029.874 contactos que ames para evitar que una maldición caiga sobre tí en los siguientes 5 segundos. No way! pero hay gente que lo hace, pero ese es tema de discusión para otro día y otras personas.

Y las necesidades.... primero comemos, nos vestimos y vivimos, después importa cómo sea nuestra vida. Si me preguntan: una mierda quien se suma a esa postura! Como dice Quino, a mi gusto un filósofo de nuestros tiempos con toda la ironía en su personaje Mafalda: "lo urgente no deja tiempo a lo importante".

Y claro! podemos comer exquisito, por fuera estar a punta de Barbados, Gucci, Chanel, Calvin Klein y Nike, tener una salud impecable y podemos vivir solos con valores y principios propios de una piedra, una silla o un radio hasta los 120 años.

Qué estupidez, clasificar qué es lo más importante! Si hasta en educación nos dan la lata de tratar a cada uno como individuo, un ser único e irrepetible. Por supuesto debo comer para vivir y eso no implica que es lo más importante en mi vida y menos que sea la cumbre en la escalera de mi existencia.

¿Uds han escuchado decir "hay madres que se sacan el pan de la boca por dárselos a sus hijos"?, ¿y qué hay de la gente que se suicida por amor?. Entonces, las prioridades las da cada uno.

Quizás esto parezca una pataleta de reveldía al sistema, pero lamento comunicarles que tampoco es por eso. Es porque hoy recibí un mail que decía que tenían ganas de conversar conmigo y aún no tomo desayuno y ya es más de medio día, pero eso y la mejoría de mi hijo quien aún está un poco enfermo es lo que necesito hoy. ¡Las pelotas las necesidades y su jerarquía! hay veces que tengo hambre o frío y otras que necesito un abrazo. Dicen que el cambio es constante.

Mi padre me enseñó a priorizar cuando yo era una niña y en base de eso funciono: mi hijo, mi hermano, mis padres, mis amigos, mi pega, mis estudios y después el resto del universo y hasta el momento no es transable ese orden, al menos que algún día tenga más hijos porque el primer lugar entonces sería plural. Hay días en que el resto del mundo pasa a un lugar más bajo, hace 6 años mi hijo no nacía y mi hermanito estaba puntero seguido por mis padres y mis estudios y la pega era diversión de verano.

En fin, es cada corazón quien organiza lo fundamental según lo que nos dé o quite la vida. No quiero que organicen ni juzguen la mía... porque soy feliz.

Gisell

jueves, noviembre 10, 2005

Quienes somos primero

Leí tu blog y me parece otro bajón. Yo estoy igual que Ud. Pero hay una cosa: no estoy de acuerdo contigo en algo, yo sé que intentas ser la mejor persona del mundo para quien más amas pero eso no te da el derecho de engañarla para protegerla. No tratemos de ser Dioses indestructibles cuando somos mujeres, dueñas de casa y trabajadoras a la vez, somos hijas, hermanas, amigas y por sobretodo somos madres: y las mejores que hay! Lo sabes.

Yo ya no trato ser el padre que se fue, ni Dios, ni la ídola de mi hijo, pero soy su madre que lo reta cuando se porta mal, la que trabaja y pelea con medio colegio si me cambian el horario y no puedo pasar a buscar a la hora a mi hijo a su sala, soy la que lo cuida y se desvela por él, la que lo abraza, la que mataría si alguien le hace daño, la que juega hasta hacer el ridículo en la calle por una risa de él, la que se ríe y le cuenta sus secretos y esas cosas importantes pero también soy quien llora a su lado. Pues también tengo pena a veces, y si me pregunta no le miento porque al final sabe que cualquier cosa que me suceda él lo puede curar con un abrazo y un beso, o con sólo existir.

Gabriel toda esta semana me ha repetido incansablemente: "equivocarse no es malo, porque después puedo arreglar lo que hago mal".

Arreglemos aquellas partes de nuestras vidas que están mal? Si sacas cuentas: seremos unas jóvenes viejas, pero tenemos la bendición de ser madres de unos niños preciosos, inteligentes y sanos. Y eso hace que toda la mierda que hemos vivido haya valido la pena aguantarla por un día más por esos bebés.

Te quiero mucho, amiga

Gisell

lunes, noviembre 07, 2005

Post vómito

Una vez que se vomita el mundo da menos vueltas a nuestro alrededor, se puede prender un cigarro e incluso se puede volver a beber después que ese gusto asqueroso se quita de boca. Aunque yo diría que lo más increíble es que se puede beber AGUA, sin sentir asco.

De cualquier modo, ya estoy pasando aquel efecto del alcohol. No llegué a una "apagada de tele", pero con lo que bebí fue suficiente para vomitar. Y ojo: nadie nos obliga a beber sin precauciones!

Ahora quiero volver a estabilizarme, no pretendo apaciguar la caña que, mentiría si dijera que no existe, sólo quiero que duela menos y volver a emborracharme con algún veneno menos amargo y menos doloroso, que seguramente no existe..

LITA